Es habitual que las comunidades de vecinos cuenten con áreas verdes dentro de las zonas comunes. Debido a las características de estas áreas, no existe una persona que sea responsable de su cuidado. Esto hace que sea difícil mantener en buen estado las áreas verdes. Una de las mejores soluciones es el sistema de riego, pues permite automatizar los procesos. A continuación, veremos algunas ventajas de instalar este tipo de sistemas.
Sistema de riego por goteo
Se trata de una serie de materiales instalados con la finalidad de facilitar el riego de las áreas verdes. Existen diferentes tipos que pueden adaptarse a las necesidades propias del jardín en cuestión.
El sistema más habitual es el sistema de riego por goteo pues es fácil de instalar y mantener. Como su nombre lo indica, su funcionamiento se basa en permitir que caigan gotas sobre las áreas verdes para mantener el suelo con suficiente humedad. Este mecanismo es realmente sencillo puesto que no requiere supervisión constante. Sin embargo, también presenta algunos inconvenientes, especialmente por el bajo flujo del agua a través de la tubería. Esto puede propiciar que se acumulen sedimentos, haciendo más fácil la obstrucción del sistema. Como resultado, algunas áreas seguirán recibiendo el riego por goteo de forma normal mientras que otras carecerán del suministro necesario de agua.
En caso que surja la problemática mencionada anteriormente, bastará con limpiar el sistema para eliminar cualquier material extraño. Si existe un daño mayor, lo recomendable es reemplazar los tubos obstruidos y las piezas que hayan quedado inservibles. Normalmente no es necesario reemplazar grandes secciones del sistema de riego, puesto que no suele presentar fallas constantes.
Otros sistemas de riego.
Como mencionamos anteriormente, existen diferentes tipos de sistemas de riego, los cuales pueden adecuarse a las necesidades de las áreas verdes. Aunque el sistema de goteo es eficaz en la mayoría de los casos, en algunas circunstancias podría ser recomendable utilizar un sistema distinto.
Podemos entender fácilmente esto si tenemos en cuenta que no todas las plantas y flores tienen las mismas necesidades de agua. Por lo tanto, sería un error considerar que un sistema será útil en todos los casos. En cualquier caso, los mecanismos automáticos de riego permiten un mejor control del agua que se administra en el suelo. Estos sistemas pueden controlar la apertura y cierre de los mecanismos de riego, así como la cantidad de líquido que debe aplicarse en cada zona. De esta forma, sin importar cuáles sean las necesidades de cada sección de plantas, se suplirá sin ningún problema y con un mínimo de supervisión humana.
Para garantizar que las áreas verdes se mantengan en las mejores condiciones posibles, lo mejor es que el diseño lo realicen personas especialistas en el tema. Lo mismo ocurre con la instalación y mantenimiento del sistema de riego. Por eso, la recomendación es que sean jardineros especialistas quiénes realicen todos estos trabajos. Así se garantiza que se mantengan en buenas condiciones tanto el sistema de riego como las áreas verdes.
